Los alumnos del Instituto Ferran Tallada idean acciones para promover el aprovechamiento alimentario en el barrio del Carmel

Un taller sobre el aprovechamiento alimentario en el Mercado del Carmel, un canal de TikTok y un juego de mesa han sido el resultado del proyecto de Aprendizaje Servicio que hemos impulsado con los alumnos del Instituto Ferran Tallada de Barcelona.

El alumnado de 2º A y B  del Ciclo Formativo del Grado Superior de Integración Social del Instituto Ferran Tallada ha finalizado el proyecto de Aprendizaje Servicio, que hemos impulsado con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona, ​​ideando tres acciones para promover el aprovechamiento alimenticio en el barrio del Carmel de Barcelona.

Entre los meses de enero y abril, más de una cuarentena de alumnos han estado trabajando en varias sesiones, que hemos impulsado desde Espigoladors, la problemática de las pérdidas y el desperdicio alimentario con una perspectiva de Justicia Global crítica y comprometida. El resultado ha sido un taller sobre aprovechamiento alimenticio en el Mercado del Carmelo, un canal de Tik Tok que sensibiliza sobre la problemática y un juego de mesa.

Del descubrimiento del problema, a la búsqueda de soluciones:

El proceso de aprendizaje ha constado de distintas fases. Una primera etapa de descubrimiento de las pérdidas y el desperdicio alimentario desde una perspectiva de justicia global. Durante estas sesiones, se realizaron actividades que acercaran al alumnado a conocer las causas y consecuencias de la problemática como espigar, visitar el obrador de inserción laboral de es im-perfect y el proyecto de La Botiga del Prat de Llobregat. A continuación, se presentaron testimonios de procesos migratorios de personas procedentes del Sur global, vinculadas a proyectos alimentarios. Esto permitió el trabajo posterior en pequeños grupos de debate, sobre justicia económica y ambiental, justicia de género y derechos humanos y derecho a migrar.

Finalizada esta primera fase, ambos grupos realizaron un pequeño diagnóstico sobre la situación del barrio en relación a la problemática a partir de entrevistas a agentes clave de este entorno. Así, pudieron trabajar con esta información para identificar los problemas locales y las posibles soluciones que podían aportar.

Una vez detectados los problemas, procedimos a buscar sus soluciones. Se realizó una primera lluvia de ideas de todas las acciones que querían llevar a cabo como grupo. Las priorizamos según su viabilidad y su impacto y, sobre todo, según la propia motivación que ellos y ellas tenían. Por último, cada uno de los grupos decidió cuál sería su acción.

Tres acciones para convertirnos en parte de la solución:

Por un lado, los alumnos de 2A decidieron utilizar las redes sociales como motor para sensibilizar sobre el desperdicio alimentario. Lo hicieron creando un canal de TikTok para compartir vídeos en los que preguntan a los estudiantes del Instituto sobre la problemática. Una gran forma de hacernos reflexionar a todos y todas.

Además, para ir aún más allá, realizaron un taller sobre aprovechamiento alimentario en el Mercado del Carmel. A partir de la preparación de unos pancakes de plátano maduro, explicaron las causas y consecuencias del desperdicio alimentario y dejaron probar esta receta de aprovechamiento a las personas usuarias y vendedoras del mercado. También, regalaron delantales diseñados por los propios alumnos que promueven el hecho de valorar las frutas más maduras e imperfectas.

Por otra parte, el juego de mesa “Aprofita’m” («Aprovéchame»), fue el servicio diseñado por el grupo de 2B. El objetivo era crear una herramienta educativa, dirigida a alumnos de Secundaria, para promover la cocina de aprovechamiento y sensibilizar sobre todos los temas tratados a lo largo de las sesiones. A través de preguntas e intercambios, las jugadoras deben conseguir ingredientes para completar recetas de aprovechamiento. Una dinámica que busca generar conciencia sobre la necesidad de utilizar todos los alimentos disponibles para preparar recetas de aprovechamiento, evitando el desperdicio. Para poner a prueba el servicio, el alumnado lo presentó sus compañeras de 2º de Bachillerato de la optativa de población, territorio y justicia. El objetivo es que el juego circule para llegar así a muchos más jóvenes.

Por último, y para dar por finalizado todo el proceso de Aprendizaje Servicio, llevamos a cabo la clausura del proyecto en el que ambos grupos pusieron en común todos los conocimientos obtenidos, evaluaron el procedimiento y, sobre todo, celebraron el gran éxito que habían tenido todas las acciones.

Desde Espigoladors queremos dar las gracias a todos y todas las alumnas y profesoras del Ciclo Formativo del Grado Superior de Integración Social por las ganas y la implicación en todos los pasos de este camino. ¡Y gracias, sobre todo, por ser parte de la solución!